Realidad ultraderechista - Hungría

El gobierno de ultraderecha en Hungría, liderado por Viktor Orbán, prometió fortalecer la soberanía nacional, controlar la inmigración, preservar una "familia tradicional" y asegurar la estabilidad económica. En la práctica, ha cumplido algunas de estas promesas pero mediante políticas autoritarias que han limitado derechos y libertades fundamentales.

Orbán ha cambiado la Constitución para prohibir el matrimonio igualitario y la adopción por parejas del mismo sexo, además de aplicar leyes que restringen fuertemente los derechos LGTBIQ+. También ha impulsado medidas duras contra la inmigración, incluyendo la expulsión y persecución de refugiados y un control riguroso sobre los movimientos migratorios.​

En cuanto a la economía, prometió prosperidad para Hungría, pero la situación actual revela un deterioro con inflación alta, caída de la moneda local (florín) y perspectivas de recesión. Además, el país ha sufrido la pérdida o bloqueo de fondos importantes de la Unión Europea debido a la falta de Estado de derecho y corrupción en el gobierno.​

Políticamente, Orbán ha concentrado el poder, eliminando contrapesos institucionales y controlando gran parte de los medios de comunicación, construyendo un régimen cada vez más autoritario que limita la competencia política real. Esto ha generado una creciente brecha social y económica, así como desgaste en los servicios públicos de salud y educación, con el 63% de la población atribuyendo a su gestión la mala situación económica y social.​​

Las consecuencias de estas políticas son la polarización social, la erosión de los derechos civiles y democráticos, el aislamiento progresivo en la UE, y un declive económico que pone en riesgo su legitimidad política frente a una oposición que comienza a ganar terreno, con nuevas fuerzas como la de Peter Magyar que representan un desafío para Orbán.​​

Esto indica claramente las consecuencias que suponen gobiernos ultraderechistas, que mediante propuestas dirigidas a ciudadanos descontentos y contaminados —por redes sociales y medios de comunicación— alcanzan el poder a costa de derechos fundamentales, deterioro económico y creciente descontento social, evidenciando en el caso de Hungría, el declive del régimen y atrapado en una crisis multidimensional.

Situación económica general 

  • Antes de Orban : Crisis profunda y rescate FMI.
  • Actual con Orban : Estancamiento, inflación alta y declive económico reciente.