Altruismo

Unos años atrás, una marquesa de Sevilla, que solía hacer caridad en aquel establecimiento social, coincidió con aquel hombre que comía con el resto de necesitados.

La marquesa preguntó a las monjas por aquel hombre de la gabardina gris, y ellas le explicaron que dedicaba su vida, desde hacía años, a vender bolígrafos para ayudar a los pobres. Quiso hablar con él y pidió a una de las monjas que lo invitara a su mesa. Una vez que llegó, haciendo todo tipo de reverencias, fue invitado por ella a compartirla.

Entablaron conversación. La marquesa quería conocer la razón por la que aquel hombre tenía aquel gesto altruista...


Si quieres leer el resto puedes encontrarlo en mi libro "Sentimientos prisioneros" que próximamente será publicado.